No hay nada igual en el mundo, como los famosos copos de nieve, como las hojas de un árbol que no se repiten nunca; así somos los seres humanos, cada uno tenemos un mapa genético que nos hace únicos,
que nos distingue de los demás, que nos da singularidad y autenticidad, como una marca indeleble; nuestras huellas digitales, nuestro timbre de voz y nuestro temperamento es único e irrepetible.
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